August 25, 2018 A pesar de los avances significativos en la región, la Organización Panamericana de la salud (OPS), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Asociación Interamericana de Ingeniería Sanitaria y Ambiental (Aidis), indican que cerca de la mitad de los residuos que se generan en América Latina y el Caribe tienen una disposición final inadecuada, por lo que no hay garantía de control sobre los contaminantes y éstos continúan circulando en la atmósfera, agua y suelo. Adicionalmente, en botaderos, zonas urbanas y rurales se continúan haciendo quemas de basura al aire libre, lo cual, genera emisiones peligrosas con un impacto negativo en la salud de las personas. De allí que el manejo inadecuado de los residuos sólidos incide en el ambiente y en la salud de las personas; por ello, es inaplazable atender el problema de la basura, lo cual exige la participación y la responsabilidad compartida entre las distintas instancias de gobierno y sus ciudadanos. @MiCiudadRecicla es una iniciativa de escala comunitaria que se desarrolla en el estado Carabobo (Venezuela) enfocada en contribuir con la gestión integral de residuos sólidos en escuelas y comunidades de la Gran Valencia (municipios Valencia, San Diego y Naguanagua) e implementada, desde una red ciudadana que involucra el sector no gubernamental, público, privado y académico. Con un año y medio de funcionamiento (Enero 2017 – Agosto 2018), esta iniciativa ha desarrollado un programa de educación y participación ciudadana en escuelas y comunidades, eventos de divulgación local y campañas en redes sociales que ha derivado en 15 equipos de trabajo coordinando puntos de acopio de materiales reciclables con alcance a 10.000 ciudadanos. De esta manera, ha fomentado hábitos sostenibles, ha desviado de la ruta de la basura al menos 14 toneladas y media de residuos sólidos y ha canalizado recursos – a través de la venta de estos residuos-, para la autogestión escolar y Asilos, Casas Hogares y Programas de Protección a la Infancia. Actualmente, 12 instituciones educativas participan de una red escolar de reciclaje y en al menos, 20 condominios, hay puntos permanentes de acopio; adicionalmente se apoyan 3 puntos permanentes públicos de acopio en la Gran Valencia y, se efectúan jornadas de acopio abiertas a la ciudadanía, con motivo de eventos como la Feria del Libro y caminatas y carreras benéficas, en alianza con actores públicos y privados.El punto de partida de esta iniciativa fue la conformación de un equipo de acción ciudadana que planifica y ejecuta actividades divulgativas, formativas y de aprovechamiento de materiales reciclables en espacios públicos y privados de la Gran Valencia. Se trata de una alianza basada en objetivos comunes y que, en base a consensos, va desplegando acciones en la ciudad. De esta manera, se ha fomentado el desarrollo de jornadas de acopio y la instalación de puntos de acopio permanentes en escuelas, comunidades, clubes y espacios públicos dónde principalmente se recupera cartón, plástico y vidrio. Las actividades formativas y la divulgación de información en redes sociales -qué acopiar y cómo y los beneficios del reciclaje-, ha complementado la acción de separar y acopiar estos materiales en el hogar, escuela, club o condominio para ser llevados a las jornadas o puntos de acopio. Los puntos permanentes públicos de acopio en la Gran Valencia, están gestionados por diversos actores. En Valencia, en el Parque la Viña, se ubica el Centro de Acopio de Materiales Reciclables del Consejo Comunal La Viña, este centro de acopio recibe plástico y vidrio. Actualmente todo el plástico es donado al Liceo Manuel Felipe de Tovar y en 5 años ha recuperado 17,8 toneladas de vidrio a favor de las obras sociales apoyadas por las Damas Internacionales de Valencia Asociación Civil (DIVAC). En Naguanagua, se ubica el centro de acopio de Casa Don Bosco, gestionado por Fundación Reusamas que adicionalmente es un aula abierta de la cultura 3R (reducir, reusar y reciclar) y un centro de formación en reúso productivo. Finalmente, en San Diego y en alianza con el Departamento de Ambiente de la Alcaldía de San Diego (IAM Funcosandi), se apoya un centro de acopio abierto a los habitantes del municipio que recibe diversos materiales que en su totalidad son comercializados a favor de la Casa Hogar María Auxiliadora. La recuperación del vidrio se realiza a través de la alianza que desde hace 25 años mantienen las Damas Internacionales de Valencia Asociación Civil (DIVAC) y la empresa estatal Venvidrio; el material acopiado en jornadas y puntos de acopio permanentes es recolectado a través de una ruta gestionada de manera conjunta y, todos los recursos resultantes de la compra del vidrio para reciclaje, son dirigidos directamente y bajo la supervisión de las DIVAC a obras sociales en la Gran Valencia. En cuanto a la recuperación del plástico y cartón, se realiza también a través de una ruta, en este caso manejada por la Recuperadora Ambiental Yoclart. Los recursos resultantes de la compra de estos materiales son entregados a los Consejos Educativos de las instituciones educativas y Condominios que participan de la iniciativa, para ser utilizados como fondos de autogestión. Paralelo al esfuerzo operativo que se orienta a sacar de la “basura” materiales reciclables y su comercialización, Fundación Tierra Viva desarrolla actividades formativas en las escuelas, divulga información en redes sociales y trabaja junto a las instituciones de la red, en la promoción de hábitos de vida sustentables. En esta acción, estudiantes de Servicio Comunitario de instituciones con la Universidad de Carabobo y la Universidad José Antonio Páez, han participado aportando su energía y adquiriendo destrezas en el quehacer educativo y de gestión ambiental. Los hábitos son nuestras actividades y comportamientos ordinarios y desde esta iniciativa, se fomentan aquellos que “cuidan el ambiente”; se trata de acciones y costumbres cotidianas desarrolladas de manera tal que permitan satisfacer las necesidades sin comprometer el futuro de las generaciones venideras. La invitación es a conocer los residuos que generamos, reducirlos a través del reúso y mejor aún, optar por productos que no requieran de empaques desechables y finalmente, con los residuos que inevitablemente vamos a producir, habituarnos a separarlos, acopiarlos correctamente y llevarlos a los puntos de acopio. Esta acción a escala escolar o comunitaria, implica un cambio en la gestión de los residuos y con ella, el ciudadano contribuye con la disminución de residuos sólidos que, de otra manera, van a dar a vertederos de basura formales e informales. También favorece al aprovechamiento de materias primas, la disminución del uso de agua y energía, y una menor generación de gases de efecto invernadero derivados de los procesos industriales y quema de residuos en vertederos; de manera indirecta, influye en la reducción de la contaminación del suelo y el agua resultante de la permanencia de los residuos en sitios inadecuados o sin medidas de saneamiento. Ciudadanos organizados y empresas han encontrado en esta red, la posibilidad de que donaciones, acciones de voluntariado y aportes de responsabilidad social sean utilizados con la garantía del cumplimiento de diferentes objetivos vinculados al desarrollo y la sostenibilidad. Un ejemplo de esto, la alianza que por más de 10 años se ha mantenido entre Fundación Tierra Viva y Shell en Venezuela para promover la Gestión Integral de residuos sólidos en el municipio Valencia. Frente a los graves problemas socio-ambientales que enfrenta Venezuela, @MiCiudadRecicla está dando un ejemplo de cómo enfrentarlos a partir de una alianza entre distintos sectores de la sociedad. Más allá de los beneficios ambientales y el apoyo a obras sociales, desde esta iniciativa se fortalece el tejido social de la ciudad; en los puntos de acopio de escuelas y comunidades y en cada jornada de acopio, los ciudadanos que siguen y apoyan prácticas de solidaridad y sostenibilidad ambiental, se encuentran y establecen vínculos, favoreciendo de esta manera la cohesión social y el ejercicio de la ciudadanía. Jordana Ayala Gerente de proyectos socio ambientales Fundación Tierra Viva