Con la finalidad de presentar un análisis de gestión sobre el Proyecto AQUA: Fortalecimiento de actores para la gestión sostenible del agua en tres regiones de Venezuela, Fundación Tierra Viva y Redsoc publicaron el informe “Estudio de caso y sistematización de la experiencia de cada localidad del Proyecto AQUA: Canoabo, Tucupita y Siquisique. Lecciones aprendidas y buenas prácticas”.

Este proyecto se formuló desde una visión de la problemática del agua a partir de tres perspectivas distintas enmarcadas en las poblaciones de Canoabo, estado Carabobo, Tucupita, estado Delta Amacuro y Siquisique, estado Lara.

Cabe resaltar que los objetivos de este proyecto eran ambiciosos y su implementación no estuvo exenta de problemas como fue la crisis sanitaria originada por la pandemia de la COVID-19 y la escasez de gasolina en el país. Este informe también incluye información que explica los casos particulares de cada localidad para solucionar el problema de escasez de agua. Asimismo, documenta los procesos llevados a cabo durante la sistematización de la experiencia en estas tres localidades a fin de propiciar la reflexión, análisis y aprendizajes con potencial aplicación en futuros proyectos con objetivos, acciones y estrategias similares.
“Mi historia dentro del proyecto la veo como de mucho aprendizaje en términos de coordinación porque, además, ejecutamos en pandemia. Comprender las limitaciones de los equipos, de los contextos donde estábamos trabajando y a pesar de eso tuve que guiarlos de la mejor manera posible”, señala Jordana Ayala, coordinadora técnica del Proyecto AQUA.

El proyecto AQUA fue cofinanciado por la Unión Europea y tuvo una duración de cuatro años: desde el 1° de febrero de 2019 hasta el 31 de enero de 2023. Fue implementado por Fundación Tierra Viva, solicitante principal, A.C. Acción Campesina y la A.C. Red Venezolana de Organizaciones para el Desarrollo Social–Redsoc, son las organizaciones cosolicitantes.
Desde sus inicios se vislumbraba como una experiencia muy importante porque se partió de una visión de la problemática del agua desde tres perspectivas: una primera donde había que recuperar una cuenca (Canoabo, estado Carabobo); en la segunda, había que purificar el agua que consumían los pobladores (Tucupita, estado Delta Amacuro), y la última perspectiva era el abastecimiento de agua en una zona semiárida con escasez de agua (Siquisique, estado Lara). A la coordinación general del proyecto le resultó una práctica interesante porque fueron tres visiones completamente distintas que resultaron complementarias en la búsqueda de soluciones.

Asimismo, la ejecución de este proyecto dejó en los destinatarios y en los equipos una serie de conocimientos derivados de la práctica: recuperando lo sucedido, reconstruyéndolo históricamente, pero para interpretarlo y obtener aprendizajes.
“Para Redsoc el haber participado en el Proyecto AQUA fue una gran experiencia, ya que nos involucramos en un proyecto cuyo objetivo final era mejorar la calidad de vida de las comunidades atendidas y la promoción de la mujer como factor fundamental para la gestión sostenible del agua. Además, desde nuestro rol de organización responsable de la sistematización de la experiencia de este Proyecto, buscamos con este documento fortalecer el conocimiento existente sobre diversas intervenciones centradas en el acceso al agua y su gestión sostenible”, expresa Pedro Esté, coordinador de Redsoc Venezuela.

Con la presentación de este informe comienza una valiosa etapa: la difusión de esos conocimientos que se recopilan en las lecciones aprendidas y las buenas prácticas. Además, es importante que las personas se involucren a través de su lectura y contribuyan con sus acciones a asegurar el suministro de agua en sus comunidades y a su gestión sostenible, y que tomen en cuenta la experiencia vivida en el Proyecto AQUA al momento de planificar sus acciones.

El estudio puede ser descargado en el siguiente enlace

Fundación Tierra Viva
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